Lima, Perú – 19 de agosto de 2024 – En un evento conmovedor, la Congregación de Canonesas de la Cruz celebró el 150 aniversario del natalicio de su fundadora, la Venerable Madre Teresa de la Cruz. Este evento, realizado en la Casa Madre Santa Teresita en Lima, reunió a la comunidad para honrar la vida y el legado de una mujer que, a través de su profunda fe y devoción a Cristo, dio esperanza y guía espiritual a miles de personas.
La Madre Teresa de la Cruz, nacida el 19 de agosto de 1874, es una figura destacada en la Iglesia Católica del Perú y mucho más allá. Dotada de una extraordinaria vocación, fundó en 1924 la Congregación de Canonesas de la Cruz, comunidad religiosa dedicada a la educación y la orientación espiritual. Su visión era vivir una vida de profunda unidad con Cristo y poner esta espiritualidad al servicio de la caridad y la evangelización.
Las Canonesas de la Cruz, cuyo nombre significa "Canónigas de la Cruz", son una comunidad de mujeres que viven y trabajan según los principios de la Cruz. Su carisma está moldeado por la espiritualidad de la cruz, y se esfuerzan por reflejar en sus vidas y obras el misterio del sufrimiento y la redención encarnados en la cruz de Cristo.
Celebraciones de aniversario y agradecimiento.
El aniversario comenzó con una celebración eucarística celebrada por un sacerdote y sobrino nieto de la Madre Teresa de la Cruz. Esta Misa fue un momento profundamente espiritual que unió a la comunidad en gratitud y oración. Los participantes, entre ellos la Madre General Alicia Tasayco, las Hermanas del Gran Consejo, así como muchos miembros de la congregación, se sintieron fuertemente inspirados por la presencia de Dios y el legado espiritual de la Fundadora.
Fotos: Hermana Margarita |
En su discurso, la Madre General Alicia Tasayco agradeció a todos los presentes y destacó la importancia de la unidad y la fe común que se evidencia en el trabajo de las Canonesas de la Cruz. “Todos en Cristo”, el lema de la congregación, estuvo en el centro de las celebraciones y llamó a los presentes a continuar haciendo de Cristo el centro de su ministerio y de sus vidas.
Además de los feligreses, en las celebraciones también participaron profesores y educadores de los colegios de las Canonesas de la Cruz, así como amigos y socios de la comunidad. Esta diversa reunión de creyentes reflejó el amplio impacto que la obra de las Canonesas de la Cruz ha tenido en Perú y más allá.
Mirando hacia el futuro
Si bien el 150 aniversario es un momento de retrospectiva y gratitud, la comunidad de Canonesas de la Cruz también mira hacia el futuro. Siguen comprometidos a mantener vivo el legado de su fundador y a proporcionar un ancla firme de fe y caridad en un mundo cambiante.
El aniversario de la Madre Teresa de la Cruz es un recordatorio de cuán profundamente la fe puede moldear una comunidad y permitirle difundir luz y esperanza entre generaciones. Que el trabajo de las Canonesas de la Cruz siga tocando muchos corazones e iluminando los caminos de muchas personas en los años venideros.